
En los círculos políticos del territorio, así como en los pasillos del Congreso, se sigue comentando sobre la propuesta de celebrar un referéndum de Estadidad sí o no.
Lcdo. Neftalí Fuster González
REFERENDUM PELIGROSO
En los círculos políticos del territorio, así como en los pasillos del Congreso, se sigue comentando sobre la propuesta de celebrar un referéndum de Estadidad sí o no.
La propuesta puede ser naturalmente atrayente, si se ve como un paso adelante en el largo y escabroso camino hacia la soberanía de la más antigua colonia del planeta.
Algunos políticos listos piensan que semejante consulta puede servir para mover a las urnas a electores estadistas que justificadamente se sienten defraudados por las actitudes y actuaciones de líderes del Partido Nuevo Progresista (PNP) y de altos funcionarios del gobierno estatal.
Es de esperarse, además, que ese referéndum sea favorecido en medios de comunicación y agencias de publicidad, que tendrían grandes ganancias que se generarían en la campaña.
A los que promueven ese referéndum les recuerdo que el ideal de Estadidad es esencialmente la aspiración de igualdad que se proclamó en las Cortes de Cádiz, allá para 1812, por Ramón Power, diputado por Puerto Rico; la que sostuvo José de Celis Aguilera con su Partido Liberal Reformista; la que enarboló Román Baldorioty de Castro, tanto en las Cortes Constituyentes Españolas como en el ideario del Partido Autonomista Puertorriqueño; la que defendieron Luis Muñoz Rivera y José Celso Barbosa, tanto bajo la soberanía española como bajo la americana.
Por la igualdad se ha luchado en Puerto Rico por más de dos siglos. Bajo la Corona de España esa aspiración se llamó Autonomía y bajo la República Americana se llama Estadidad.
Ese noble ideal no es para ser utilizado por los políticos, ni debe servir de banderín de enganche para que candidatos busquen votos, ni para que ningún buscón se beneficie.
La Estadidad está por encima de los políticos, de los partidos, del gobierno, de las alcaldías, de los fondos federales, de los candidatos y de los chupópteros de la ubre del presupuesto.
Llevar la Estadidad a un referéndum en que es muy difícil prevalecer, para atender las conveniencias financieras y partidistas de los vividores, puede resultar en retrasar por muchos años más la descolonización de Puerto Rico. Y quién sabe si el fallido proceso resulte en la Independencia involuntaria.
Digo que es muy difícil prevalecer, por varias sencillas razones:
Primero: El PNP se ha transformado, de ser un partido ideológico, a un partido de gobierno. Nada hace por educar, por inspirar, por organizar, por hacer presente la Estadidad en la conciencia y el intelecto de los puertorriqueños.
Segundo: La oligarquía colonial, que no quiere pagar contribuciones federales, está en abierta alianza con la extrema izquierda. Y de ahí tenemos que todos los diarios que circulan en este territorio están en contra de la Estadidad. En esa misma ofensiva ideológica de la alianza colonial-izquierdista, están los programas de noticias, y de comentaristas prejuiciados, en radio y televisión. Frente a ese diario tsunami propagandístico, el PNP nada tiene que oponer.
Tercero: Mientras los legisladores del PNP nada hacen por la Estadidad, la alianza colonial-izquierdista controla las universidades, las uniones, los colegios profesionales, las organizaciones presuntamente culturales —que son realmente núcleos de propaganda— y otras mil y una entidades. Esas agrupaciones no tienen mucha gente, pero sí tienen muchísimo acceso a la prensa.
Antes de que se apruebe el referéndum, la Asamblea Legislativa debe considerar el hecho de que el pueblo está hastiado de consultas de estatus inconsecuentes, como el que de buena fe se celebró —con poca participación— el 11 de junio de 2017.
Coincido plenamente con el estadista sincero y consecuente que es el exsenador Orlando Parga:
"Hay que empezar convocando a un congreso estadista al que se prohíba la entrada a candidatos y crear una estructura no-partidista consagrada a la causa."
Hagan los desacreditados políticos lo que les dé la gana. Pero sepan que la Estadidad —la mejor herencia que podemos dejarle a nuestros hijos— no puede ser objeto de juego ni de oportunismo. El ideal merece el esfuerzo, la dedicación y patriotismo de los que son capaces de soñar en un futuro mejor para Puerto Rico, como el Estado 51.
CITA MEMORABLE
“Ante esta situación de grandes posibilidades para la Estadidad, los políticos del PNP, en lugar de estar más unidos que nunca detrás de adelantar el ideal, se encuentran en una guerra con la Junta de Supervisión Fiscal y entre ellos mismos con chismes por nimiedades y deseos de protagonismo electorero. Tenemos que hacernos la pregunta: ¿verdaderamente estos políticos creen en la Estadidad o en los puestos y las prebendas que van con ellos?” —Dr. José M. Saldaña, expresidente de la Universidad de puerto Rico, en El Vocero, 13 noviembre 2018.
Frente Amplio por Puerto Rico
Frente Amplio por Puerto Rico. Esta propuesta es para que los puertorriqueños podamos salir del estancamiento político actual. . Primeramente, soy un puertorriqueño de 61 años, maestro de historia y seguidor de los temas políticos de mi país y la region a la que pertenecemos. Ningún sistema político-económico es perfecto. Tampoco el estatus va a resolver el problema de gobernanza que ha vivido Puerto Rico en los últimos 40 años. Lo único que puede ayudar a cambiar esta madeja en la que estamos sumidos, es una organización política que reúna a todos los sectores que queremos un cambio verdadero. Un cambio en la manera de gobernar y afrontar los problemas de esta tierra. Hay países independientes en crisis y, de igual forma ha habido caos y desasosiego en algunos estados del país más poderoso del mundo. Por lo tanto, tenemos que aspirar a un nuevo modelo de gobernarnos. Y en este momento las alternativas nuevas estas fragmentadas y dispersas cada cual por su lado. Estoy hablando de crear un Frente Amplio por Puerto Rico. Este debe reunir al PiP, Victoria Ciudadana, y todo grupo y persona que esté luchando de manera solitaria sin lograr resultados. Sin embargo, llevo años escribiendo sobre este partícular y nadie hace nada. Todos siguen por su lado de manera egoísta y aparcelada buscando un cambio que no ven llegar. Pero se empeñan en seguir con la misma forma o fórmula. Ahora que hay sectores que están dispuestos a hacer ese cambio, los líderes no se atreven a dar un paso al frente y hacer la propuesta para formar ese Frente y aunar propuestas y presentarlas a ese pueblo que espera ansioso por un verdadero cambio. Vamos líderes de los diferentes partidos y movimientos, demuestren que Puerto Rico, está por encima de sus aspiraciones y egoísmos. Esperamos por alguno de ustedes que de ese paso al frente. Reacciones y debate de altura adelante.www.elexpresso.com no se hace responsable de las ideas expresadas por los autores de los comentarios y se reserva el derecho a eliminar aquellos contenidos que: