En pie de lucha por salvar vidas
Por Griselle Vázquez Sevilla
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TOA BAJA — Debido a una difícil situación económica se plantea el futuro del Hogar Divino Niño Jesús, una institución sin fines de lucro que lucha por seguir brindando apoyo a jóvenes con problemas de adicción y necesidades mentales.
La misión de este centro es «salvar vidas» y trabajar con jóvenes y adultos que han sido procesados por la justicia y pueden ser referidos para rehabilitación. La institución ofrece un programa de tratamiento integral que incluye atención médica, psicológica y espiritual, explica Carlos Pacheco, su director.
El próximo mes de marzo el Hogar Divino Niño Jesús —localizado en la carretera 854 de la comunidad Media Luna, de Toa Baja, a pasos de la alcaldía local, celebrará su 30 aniversario. Sin embargo, en esta etapa de su existencia, la institución sin fines de lucro enfrenta serios desafíos económicos que amenazan sus servicios.
Pacheco, su director, ha compartido que, en los últimos cinco años, la situación ha sido «muy cuesta arriba» debido a falta de donativos lo que coincide con un alza en la renta que considera onerosa. Actualmente la renta mensual es de $3,200.
La institución ya tiene una deuda atrasada de 10 meses de renta y está en constante lucha para pagar los gastos ordinarios, aunque, a pesar de esto, tiene la esperanza de mantener el hogar abierto.
La carga financiera no solo incluye la renta, sino que también el Hogar enfrenta atrasos significativos en pagos por parte del gobierno, a través de APS, relacionado a la reforma del sistema de salud (Apoyo Psico-Social). Esta demora se debe a las constantes peticiones de documentos y se sumó a los atrasos por los días festivos de las navidades, según explicó.
«El gobierno nos debe (fondos) desde septiembre, y la situación se ha vuelto insostenible», explica Pacheco, quien no solo es un líder comunitario, sino también un ex productor de televisión de recordados programas como “A millón”, “El show del mediodía de WAPA TV” y “Entrando por la cocina”, entre otros.
En entrevista con El Expresso, Pacheco destacó que la situación económica del Hogar “es crítica” y que la deuda actual con el gobierno es de alrededor de $50,000. «Si yo fuera otro, los sacaría (los pacientes) a la calle. Pero, la realidad es que yo sigo a un Cristo vivo y, realmente, trabajo para Dios. Cada uno de esos participantes es más costo efectivo a cualquier gobierno, al mismo plan de salud», dijo.
Para Pacheco la prioridad es encontrar patrocinadores que puedan ayudar a cubrir los gastos. «Estamos buscando patrocinadores. Esto cuesta tiempo y dinero, pero estoy dispuesto a seguir adelante», dijo.
El hogar ha recibido apoyo de personas solidarias que quieren ayudar a mantener la institución abierta, enfatizó. Pero, indicó, “la misión del hogar es clara. Hemos salvado, salvamos y seguiremos salvando vidas, porque este proyecto no me corresponde a mí; este proyecto es de Cristo».
PERSISTE INCERTIDUMBRE
Sin embargo, la incertidumbre económica se siente a cada paso. Los recortes en la empleomanía obligaron a Pacheco a reducir su equipo de trabajo.
A pesar de estos desafíos, Pacheco mantiene la esperanza: «Creo que todo está a prueba; los caminos de nuestro Señor son angostos, de piedra y espinas, y sé que algo bueno ha de venir. Hay mucha gente interesada en que esto continúe».
El Hogar Divino Niño Jesús representa no solo un espacio físico, sino un hogar para quienes han encontrado en él una segunda oportunidad.
Con la comunidad y el apoyo de antiguos participantes, Pacheco se aferra a la idea de que «esto es un apostolado que Dios puso en nuestras manos».
Mientras la institución enfrenta adversidades económicas, la resiliencia y la fe de su director y su equipo generan una luz de esperanza para el futuro, reafirmando su compromiso con aquellos que más lo necesitan en la sociedad puertorriqueña.
