Seleccionar página

Supera urgencia del corazón

Supera urgencia del corazón

Por Zenaida Ramos Ramos

zramoselexpresso@gmail.com

Hace dos años, Felícita Ramos Rosado temió perder su vida por una enfermedad cardíaca, pero ha podido superarla gracias a su fe en Dios, a las atenciones médicas y al respaldo de su familia.

Un catarro fuerte la condujo a una sala de emergencia en la carretera 167, en Bayamón, cuando tenía 64 años. No podía respirar bien y la transfirieron en ambulancia a otro hospital porque tenía agua en los pulmones.

Luego de los análisis pertinentes, el médico le diagnosticó un fallo cardíaco, por tal razón, respiraba con gran dificultad. Le hicieron un cateterismo cardíaco para determinar si tenía una arteria coronaria obstruida y salió bien.

Entonces, le colocaron un desfibrilador externo automático que se utiliza cuando se interrumpe el flujo de electricidad en el corazón y este se pone lento. Cuando es necesario, ese dispositivo emite descargas eléctricas y reestablece el flujo de electricidad en el corazón.

“Me asusté porque el doctor Sánchez me dijo que mi corazón estaba funcionando a un 15 por ciento. Eso era muy bajito. Me dijo que me podía dar un ataque al corazón o el corazón dejar de latir y me asusté muchísimo, pero como ellos actuaron rápido, me tranquilicé un poco”, narró Ramos Rosado, madre de dos mujeres y tres varones adultos.

Por otro lado, el Dr. René Pérez Ríos, especialista en cardiología nuclear e intervencional, explicó que un fallo cardíaco es “la constelación de síntomas que surgen como consecuencia de un ventrículo izquierdo débil. Este se encarga de succionar sangre a los pulmones y enviarla a través de la aorta a distintas partes del cuerpo… Cuando el corazón está débil, la succión de la sangre a los pulmones no es efectiva. La sangre se requeda en los pulmones, produciendo congestión venosa en la vena del pulmón”.

Cuando pasa poca sangre a través de la aorta (arteria principal que transporta sangre oxigenada), el resto del cuerpo recibe menos sangre de la que necesita. “Se afectan los riñones, el cerebro, el intestino y la función renal. Las piernas se hinchan porque el corazón no es capaz de succionar la sangre de los pulmones… Ese cuadro se llama fallo cardíaco”, indicó el cardiólogo.

CUIDADOS ESTRICTOS

Ramos Rosado salió del hospital con un tanque de oxígeno y con instrucciones estrictas para cuidarse. “Tenía que seguir una dieta. No podía comer sal; nada muy condimentado y tomar unos medicamentos… La sal produce que el cuerpo retenga líquido”, mencionó la residente de Bayamón.

Antes de esa emergencia médica, ella se fatigaba y se cansaba con frecuencia, “pero asumía que me pasaba eso como siempre estaba en movimiento. Jamás pensé que era algo del corazón. No me sentía nada ni el corazón agitado. Básicamente era que no podía respirar bien”.

Sin embargo, Ramos Rosado llevaba una vida con estrés, no se alimentaba bien, fumaba desde la adolescencia y no hacía ejercicios. Se ha determinado que esos factores ponen en riesgo la salud cardíaca.

Pasó cinco meses con el desfibrilador externo automático, pero el Dr. Ricardo Pérez Feliciano determinó a principios del año pasado que ella necesitaba un desfibrilador permanente en su corazón.

El doctor Pérez Ríos explicó a El Expresso que cuando el corazón funciona menos de 35 por ciento, la persona está en riesgo de una muerte súbita porque tiende a desarrollar una arritmia que se llama fibrilación ventricular.

“Es una arritmia fatal, mortal. A esos pacientes para ayudarlos a evitar la muerte súbita por la fibrilación ventricular, inicialmente, le ponemos un desfibrilador externo que no es otra cosa que el chaleco y le damos medicamentos para compensar el cuadro de fallo cardíaco Le damos una oportunidad al corazón para que se recupere”, dijo el médico.

“Si a los tres meses, todavía el corazón está débil, menos de 35 por ciento, entonces hay que ponerle el desfibrilador permanente. Se implanta debajo de la piel en el pecho, como si fuese un marcapasos. Ese desfibrilador se deja permanentemente y se cambia cada cinco, seis o siete años. Si el paciente desarrolla una fibrilación, el desfibrilador da una descarga eléctrica que restablece el flujo eléctrico normal del corazón”, agregó el médico.

Sobre el Autor

Edición Digital

El Expresso en tu email

Subscríbete

* indicates required
Email Format

marzo 2024
D L M X J V S
 12
3456789
10111213141516
17181920212223
24252627282930
31  

Tiempo Puerto Rico

EL TIEMPO

booked.net